Querétaro es el destino ideal para que vivas el romance al máximo, ya sea una cena íntima o una boda de ensueño.

Redacción MAXWELL
Fotografía: Cortesía

Después del “Sí, me quiero casar contigo” te espera una de las aventuras más emocionantes: planear la boda, un día muy especial que permanecerá en tu memoria por mucho tiempo; por ello, algo que no debes olvidar es que si decides casarte en otra ciudad, el destino que elijas será clave para los demás componentes del evento. Nuestra recomendación en el mes del amor es Querétaro, el estado del romance.

En Querétaro abundan las haciendas coloniales, un punto a favor si te conquistan los espacios que esconden historias en cada rincón; además, la gran mayoría se encuentran restauradas. Su atmósfera única dará un toque de anacronismo a esos momentos imborrables, donde un beso o un vals atraviesan las décadas como una promesa.

Sabemos que seleccionar una hacienda puede resultar difícil, ya que cada una de ellas cuenta con sus propias particularidades. Por ello, es importante que un wedding planner te acompañe en todo el proceso. Lo que te podemos adelantar son los venues más destacados: Hacienda Viborillas (municipio de Colón), Hacienda Lagunillas (Huimilpan), Ex Hacienda del Lobo (El Marqués), Hacienda Galindo (San Juan del Río) y Hacienda Casa el Molino (El Marqués).

¿Cuántas veces has escuchado “El tiempo es oro”? Una frase que de tanto repetirla resulta cliché, pero no por ello deja de ser cierta. Nuestro siguiente punto está íntimamente relacionado. ¿Cuántos días te gustaría permanecer en el destino antes o después de la ceremonia? Como lo dijimos con anterioridad, en Querétaro encuentras múltiples rincones para crear momentos inolvidables con tu pareja. Así que tendrás muchos lugares por recorrer en tu historia de amor.

Algunos viñedos y casas vitivinícolas diseñan sus espacios para recrear un entorno especial para las bodas o una sencilla cena romántica llena de intimidad y los rubores del vino. Hoy en día, la predilección por los espacios al aire libre, los majestuosos entornos naturales del semidesierto queretano –a veces enmarcados con la mística Peña de Bernal–, el vino de la región y la creatividad de los planners hacen de los viñedos una de las mejores opciones para el romance.

Así que ya lo sabes, no te sobrarán las opciones adecuadas para hospedarte y organizar experiencias únicas para ti y tu pareja. Exclusivos hoteles boutique con vista a la Peña de Bernal, cenas románticas con vista a la Isla Tzibanzá, viajes en globo aerostático sobre los cielos de Tequisquiapan, bodas de toque prehispánico en la Peña, temazcales, spas… todo ello enmarcará el día más importante de tu vida.